Pero hay regiones
de mi que no puedo olvidar
y que por mas que busco al sur
ya hace mucho que no lo encuentro
se vuelve escurridizo
y consigo solo acomodar
el temor debajo de la almohada
a veces me someto al sueño
o a veces la noche me cala
y dormir es abrir los ojos
anestesiarse de sol
de luz septentrional
y de conversaciones inútiles
pero hay regiones de mi
que veo en otra gente
en piel ajena y voces en las paredes
y palabras que me abren de nuevo
y siento que tal vez sentir valga la pena.
lunes, 21 de noviembre de 2011
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