¿Porque
no fui mas atrevida en la vida?
¿Porque
no me vencí?
Tal vez
la lucha estaba en el vencimiento
en
bajar las armas
tal vez
las armas pueden ser mas sutiles
o,
la sutileza
sea la verdadera arma de vida.
Tal vez
el coraje puede ser el vaho de un respiro
y sea
su disfraz mas potente
dejar
salir la profundidad de mi –sin miedos ni cohibiciones
con la
misma gracia de una baile de niña locuaz
y la
mordacidad de una inteligencia en la piel
con una
fe absoluta y despejada desde las entrañas,
en la fabricación
de una lenta sonrisa.
Actos
de fe,
me
hacen falta.
Nos
hacen falta.
A todas
y a todos.
Hay que
mirarnos así.